(Por Adriana Bustamante) Como líder regional de People en NUMAN, considero fundamental comprender qué aspectos, distintos al salario, influyen de manera significativa en la satisfacción laboral de los empleados en las compañías de manufactura. Una encuesta reciente que realizamos nos dio información importante sobre lo que valoran hoy en día.
El 34% de los encuestados destacó la importancia del equilibrio entre la vida personal y laboral, siendo este el beneficio más valorado. Esto refleja una tendencia clara hacia la necesidad de condiciones laborales más flexibles, donde se valore el tiempo personal y se promueva un ambiente de bienestar integral.
Casi a la par, el horario flexible y el trabajo híbrido fueron elegidos por el 33% de los encuestados, haciendo énfasis en la creciente demanda por modelos laborales que permitan a los empleados gestionar su tiempo y lugar de trabajo de manera más autónoma.
Este cambio hacia modelos más flexibles, responde no solo a las expectativas de los trabajadores, sino también a las ventajas comprobadas en términos de productividad y bienestar.
En las compañías de manufactura, donde históricamente ha predominado la presencialidad, la implementación del trabajo híbrido presenta desafíos logísticos y operativos, pero también una oportunidad para modernizar procesos y atraer talento.
Un 22% de los participantes señaló que el reconocimiento y las recompensas son clave para mejorar las condiciones laborales. Este dato nos invita a reflexionar sobre la importancia de reforzar programas de reconocimiento en nuestras estrategias de retención y motivación de talento.
En el sector manufacturero, donde el trabajo técnico y operativo a menudo puede ser intenso y exigente, implementar una cultura de reconocimiento continuo puede contribuir a un ambiente de trabajo más positivo y cohesionado.
Un 11% de los encuestados destacó la capacitación y el desarrollo como un beneficio significativo. Aunque no es la mayor prioridad, sigue siendo relevante para aquellos que buscan crecimiento profesional y mejora continua.
Invertir en capacitación no solo beneficia a los empleados al mejorar sus habilidades, sino también a las empresas al impulsar la calidad del trabajo, la innovación y la preparación frente a cambios tecnológicos.
En áreas de operaciones, donde las habilidades técnicas evolucionan rápidamente, ofrecer oportunidades de desarrollo es clave para retener talento especializado y construir un equipo más capacitado.
¿Cómo se transformaron las expectativas laborales en el sector industrial?
Al analizar estos resultados, se puede apreciar una transformación en las expectativas laborales de los empleados, especialmente en el sector industrial.
En entornos donde tradicionalmente se valoraba la estabilidad, la compensación económica y los beneficios convencionales, hoy las personas buscan una mayor calidad de vida y flexibilidad.
Incorporar beneficios como el trabajo híbrido, o flexibilizar horarios, puede mejorar la satisfacción y retención del talento, crucial para una operación eficiente.
Además, el reconocimiento frecuente y la capacitación constante ayudan a mantener equipos motivados y preparados para enfrentar los desafíos de un sector en constante evolución.
A partir de esta información, es esencial equilibrar las demandas de la producción en las plantas industriales, con el bienestar de los empleados, y los beneficios emocionales innovadores son una herramienta clave para lograrlo.
Hemos visto cómo prácticas como la guardería en planta alivian la carga emocional de los empleados con hijos pequeños, brindándoles tranquilidad.
Asimismo, los programas de referidos internos no solo abren puertas a nuevas contrataciones, sino que fortalecen lazos entre los empleados, fomentando un sentido de comunidad y confianza.
La telemedicina y la atención médica en planta también se han convertido en un recurso clave. La asistencia psicológica y emocional, que ofrece acceso a terapias, coaching y talleres de manejo del estrés, ha sido vital para apoyar tanto a los empleados como a sus familias.
En el entorno industrial, la implementación de programas de bienestar, como clases de yoga y espacios de descanso, es fundamental para mejorar la salud física y mental de los empleados.
Al ofrecer estas iniciativas, las plantas de producción demuestran su compromiso con el bienestar de su personal y crean un ambiente de trabajo más positivo y productivo.