(Por Adriana Bustamante – Regional People Leader de NUMAN) Como analizábamos en un artículo anterior, hay una serie de habilidades que hoy son consideradas imprescindibles para un desarrollo profesional efectivo en el ámbito industrial.
Se trata de skills transversales y comunes a todos los roles de una organización, que combinadas con los conocimientos técnicos específicos y la experiencia en un campo determinado de acción, conforman la combinación indispensable para aportarle valor la operación.
Son habilidades que más allá de la contribución a la obtención de resultados corporativos, tienen un impacto directo en el desarrollo de carrera y los niveles de empleabilidad de las personas. Teniendo en cuenta que hoy las hard skills no son suficientes sino complementarias.
Entre estas capacidades mencionábamos la adaptabilidad y flexibilidad, las habilidades digitales y tecnológicas y la orientación a la innovación. También a la comunicación efectiva, la resolución de problemas y el pensamiento crítico, y el trabajo colaborativo en equipo.
De igual modo, a la gestión del tiempo y la organización, la autonomía, iniciativa, proactividad y asertividad, y la inteligencia emocional. Además de la capacidad de aprendizaje continuo y el liderazgo.
Estas habilidades son esenciales para la industria y el mundo laboral por varias razones. Entre ellas:
- Fortalecen los procesos de comunicación. Ayudan a mejorar las relaciones interpersonales entre colegas, clientes y empleados, reducen los malentendidos, previenen situaciones potencialmente peligrosas, contienen eventuales conflictos, mejoran las dinámicas de los equipos y potencian los resultados.
- Fomentan el trabajo en equipo. La colaboración, la empatía y el liderazgo ayudan a los grupos a trabajar juntos de manera más efectiva y lograr objetivos comunes.
- Aumentan la productividad. Por medio de la correcta gestión del tiempo y la resolución de problemas se desarrollan equipos altamente efectivos.
- Mejoran la retención de empleados. Favorecen ambientes de trabajo positivos, impactando en la reputación de las empresas que las valoran y promoviendo su cultura corporativa.
En términos de mejorar los niveles de empleabilidad, es fundamental que cada candidato o candidata tenga claro cuáles de las habilidades consideradas por la industria como fundamentales, tiene suficientemente desarrolladas y cuáles debe fortalecer.
Con el objetivo de trabajar en mejorarlas a través de coaching, capacitaciones y la realización de funciones que favorezcan su incorporación dentro del mismo ámbito laboral.
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