“Cuando logras ver más que empleados, empresas o procesos, y observas que hay familias, vidas y expectativas, todo es más fácil”

24 Abr, 23 | Artículos | 0 comments

Entrevistamos a Alessandro Cosentino, Human Resources Director – Wholesales & Operations para Colombia, Perú  y Ecuador, en EssilorLuxottica -líder mundial en el diseño, fabricación y distribución de lentes oftálmicos, monturas y gafas de sol-, con la intención de poder conocer a un experto en recursos humanos con más de 15 años de experiencia, conectando las necesidades y estrategias de negocio con la agenda de las personas y el talento.

En el marco de nuestro ciclo de entrevistas a Líderes de Operaciones, conversamos sobre su trayectoria como especialista en áreas como aprendizaje y desarrollo de liderazgo, planificación y compensación de RRHH, gestión y adquisición de talentos, diversidad e inclusión, y compromiso de los empleados.

El conocimiento en la gestión del liderazgo frente a reestructuraciones importantes, en fusiones y adquisiciones, en integraciones y también en la construcción de nuevas empresas, seguramente ofrecerá muchas instancias de reflexión.

Con un amplio recorrido profesional previo, en compañías como Zurich Insurance Company Ltd y Nestlé, Alessandro –a quien hemos tenido el gusto de conocer en la gestión diaria de NUMAN Colombia– nos comparte sus experiencias y puntos de vista, desde sus inicios en su Brasil natal hasta la actividad internacional que hoy desarrolla en la Región Andina.

Durante tu vida has estado en diferentes países, autodefiniéndote como “Ciudadano del mundo”. ¿Cómo ha sido esta aventura y qué es lo que más atesoras?

Es interesante la pregunta porque, diferente de lo que se puede pensar, vengo de un origen humilde. Por ejemplo, mi mamá vendía paraguas en la calle y yo empecé a trabajar desde muy joven para ayudar con los gastos de mi familia.

Mi primer viaje internacional fue cuando ya tenía 27 años, fue un sueño que tenía y me demore más de 5 años ahorrando para cumplirlo.

Desde ese momento mi vida cambió, mi cabeza entendió que conocer nuevas culturas, estar abierto a aprender nuevas cosas, escuchar diferentes personas me hacia una persona más completa. Básicamente, una mejor persona.

Llevando eso para la parte profesional sentía que me daba más herramientas para enfrentar los problemas del día a día, hasta los proyectos más complejos. Pero lo más importante es estar abierto genuinamente  a conocer y a aprender de las nuevas culturas.

Uno de los grandes valores que nos resaltas es la HUMILDAD, ¿cómo la definirías y cuál ha sido la clave para mantenerla en el transcurso de la vida?.

Humildad para mi es tener claro que vivir es estar en constante aprendizaje, creer que todas las personas tienen algo que enseñarte y que tú estés tan interesado en aprender que logras sacar el mejor de cada persona, de cada situación, de cada cultura.

La mejor herramienta para eso -en mi modesta opinión- es la Escucha Activa. Muchas veces escuchamos ya pensando en cómo vamos responder, y con eso perdemos mucho sobre lo que se está diciendo… Cuando las personas sienten que realmente las estamos escuchando, eso las motiva a abrirse y seguir enseñándote cosas nuevas, que seguramente en algún momento de tu vida te pueden ayudar a resolver sus problemas.

Los secretos para mantener la humildad, creo que son dos. El primero, creer realmente de corazón que es como uno debe ser y no  hacerlo porque te dicen. El segundo, es ver que el mundo apoya las personas humildes, abre puertas y te da oportunidad. Esto no quiere decir  que la vida será más fácil, pero entiendes más cómo funcionan las cosas.

Has recibido consecutivamente varios premios como “Líder Inspirador”. Para ti, ¿qué es un Líder Inspirador y qué le recomendarías a tus colegas para llegar a serlo?

Hay muchas frases hoy en día que diferencian a un líder de un jefe. Para mi es ir al básico y hacerse una pregunta: ¿de verdad te preocupas con la gente que está al tu alrededor? ¿Mismo aquellas que tú a veces no ves que necesitas?

No crecí en mi carrera porque era el más inteligente (porque no lo era), no crecí porque tenía palanca o tenía buenos contactos (porque no tenía). Creo que crecí porque era uno de los más esforzados, más determinados, más comprometidos. Pero aún más importante, porque tenía clarísimo que nunca lograría crecer solo, que necesitaba del conocimiento y apoyo de los demás.

Las personas que me apoyaban sabían que yo no miraba solo para mí, sabían que el plan era que todos creciesen genuinamente juntos. Sabían que yo me preocupaba con ellas, que yo las escuchaba, que sabía cómo eran sus vidas y necesidades fuera del mundo solamente laboral.

Creo que el mayor secreto es que yo nunca me considere jefe de nadie. Siempre me pongo en la posición de que somos un equipo y que todos aprendemos juntos todos los días.

¿Cuáles son los aprendizajes y herramientas que has adquirido en tu experiencia internacional, y que han apalancado el cumplimiento de tus resultados en el mercado colombiano?

Respetar las diferencias, entender que yo soy el que vino de afuera y tengo que adaptarme y no el contrario.

Si llegas a un nuevo lugar creyendo que eres mejor, creyendo que conoces más, eso genera resistencia, y toda resistencia te va a generar dificultades.

Ahora si entiendes que todos te pueden enseñar, que llegas a una nueva cultura que te va a mejorar como persona y profesional, si escuchas a las personas, una puerta muy importante se abre para ti.

Y con sus nuevos conocimientos, agregando al conocimiento que traes de todas tus experiencias (buenas o más difíciles), te va hacer no solo un profesional mejor, también una persona mejor.

Cuando se está en un proceso de fusión empresarial, la incertidumbre gobierna y la fuga de talentos aparece. Por lo anterior, cuéntanos desde tu experiencia y siendo cabeza de áreas de HR, ¿cuáles han sido las estrategias que has empleado para mitigar tales aspectos?

La pregunta está muy bien hecha, porque la palabra clave es mitigar. Seamos honestos: es imposible garantizar que nadie se sienta inseguro… Todo cambio genera dudas y preocupaciones.

Es muy importante:

  • Entender el por qué del cambio (si no lo entiendes, es muy difícil vender la idea).
  • Tener un plan de comunicación muy claro (un factor clave en estos procesos).
  • Ponerse en el zapato de las personas y entender sus miedos y preocupaciones.
  • Tener agentes positivos de cambio (identificar a las personas que influencian el ambiente de forma positiva) y hacer que formen parte de ese proceso.

Creo que lo más importante es el respeto por las personas, entender que no son solo empleados, que son parte de familias que serán impactadas positiva o negativamente por el proceso de cambio. Cuando logras ver más que empleados, empresas o procesos, y observas que hay familias, vidas y expectativas, todo es más fácil, y las personas –aunque no les guste mucho del cambio-, se sienten parte de él y respetadas por la empresa.

Algunos de tus colaboradores resaltan la “fortuna e inmenso placer de trabajar contigo”. ¿Cuál crees que ha sido el éxito para dejar esta huella e impactar positivamente a tus equipos de trabajo?

La gente a veces exagera un poco. Creo que quienes han trabajado conmigo claramente van a decir que soy auténtico, y que me preocupo por las personas, que me intereso en conocerlas, independiente de su cargo.

Pienso cómo puedo ayudarlas a realizar sus sueños y objetivos. Escucho, busco entender, respeto y las apoyo en sus temas personales.

Creo que principalmente no los veo como solamente como colaboradores, los veo como personas integrales y pongo sus familias y sus sueños en primer lugar. Claro que tenemos un trabajo, con objetivos claros y resultados que debemos alcanzar en nuestras empresas. Pero una persona que siente que te preocupas por ella, será una persona que siente que la empresa la cuida y así va a querer cuidar más de su empresa.

 

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